GRETA VAN FLEET - "Anthem of the Peaceful Army" (Republic 2018) ****
De
Bad Company a Wolfmother pasando por Kingdom
Come y House of Lords, varias
bandas fueron llamadas en distintos momentos los nuevos Led Zeppelin, aunque por diversos motivos en ningún caso
pudieron llevar adelante semejante halago. Es que el sonido del cuarteto liderado por
Jimmy Page, si bien sirvió para influenciar a varias generaciones de rockeros
con pelo en pecho, fue pocas veces imitado a la perfección como ha ocurrido con
sus contemporáneos Deep Purple o Black Sabbath y sus cientos de clones.
Desde
su surgimiento en Michigan en 2012, los Greta
Van Fleet, fueron señalados por la crítica como los nuevos herederos de la
corona zeppeliniana debido a las marcadísimas influencias mostradas en sus dos EPs
lanzados el año pasado (“Black Smoke Rising” y “From the Fires”) que rozaban el
robo a mano armada
A
pesar de tanto hype (o quizás precisamente por eso) en este primer LP, el cuarteto
integrado por los hermanos Josh, Sam y Jake Kiszka, además del baterista Danny
Wagner, busca infructuosamente despegarse del estigma Zeppelin desde el primer
track “Age of Man” en donde ya desde el titulo el modelo pasa a ser nada menos
que los canadienses Rush, en un tema algo alejado de lo esperado. Otra
hubiese sido la impresión si el tema apertura hubiese sido por ejemplo “The Cold Wind” que
bien podría pasar por un outake de Physical
Graffitti, de esos que tanto le gusta escatimar a Page a la hora de las
reediciones
Y
si bien en declaraciones a la prensa los hermanos Kiszka, aseguraron que Zepp
no fue una influencia importante en la banda, el cuarteto muestra en cada
detalle de las once canciones del disco, una reproducción cuasi fiel del
sonido de la leyenda inglesa. Es así que precisamente los mejores momentos son los que más
acercan al sonido del que tanto buscan despegarse en los medios, como en el primer corte “When
the Curtain Falls” o en el tema de cierre "Lover, Leaver", en las campestres "Anthem"y "The New Day" y hasta en las baladas como “Watching Over” y “You’re the One”.
Anthem
of the Peaceful Army resulta entonces una muy buena muestra de hard rock con raíces
muy marcadas; y a pesar de su innegable falta de originalidad termina convenciendo
y dejando el camino abierto para un segundo capítulo, en donde esperemos, para tranquilidad de los guardianes del Martillo de los Dioses, que lo personal tome
la delantera
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