STEVE HARRIS - British lion (EMI 2012) ** 1/2

Un león con pocas mañas




Luego de casi cuatro décadas de carrera al frente de Iron Maiden, el bajista Steve Harris sorpresivamente se decidió a sacar su debut como solista. 

Todo surge a principios de los '90 cuando llega a sus manos un material enviado por una banda under (llamada precisamente British Lion) que estaba buscando un productor reconocido que pudiera apadrinarlos. Con el correr de los años la relación de Harris con dos músicos de ese proyecto (el guitarrista Graham Leslie y el cantante Richie Taylor) se mantendría, y entre composición y composición conjunta, el bajista se dio cuenta de que tenía material para su esperado debut en solitario.

Si bien a priori se suponía que el sonido del disco rememoraría el hard rock ingles de mediados de los 70s (estilo del cual Harris es fanático confeso). lo cierto es que con solo escuchar el primer track This is my god la decepción es grande: rock insípido a medio camino entre lo alternativo y lo progresivo.

De todos modos, en British Lion podemos encontrar algunos elementos de los 70s cercanos a  Rush (en la épica A world without Heaven ) y sobre todo un sonido que lo acerca a bandas como Kings X, pero una composición discreta y el pobrísimo desempeño vocal de Taylor arruinan las buenas intenciones que el disco pueda llegar a tener. Solo se salvan la más aguerrida Lostworlds y The chosen ones con ciertas reminiscencias a la doncella de hierro

En definitiva, un paso en falso para uno de los íconos más emblemáticos en la historia del rock pesado

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