Cine rockeroAnvil: The story of Anvil (2009) ****
Dirección: Sacha Gervasi
Dirección: Sacha Gervasi
1984. El Super Rock Festival en Japón, uno de los mas importantes festivales de rock pesado de la época, contaba con tres headliners que vendieron millones de discos, y aun hoy siguen disfrutando del éxito: Scorpions, Bon Jovi y Whitesnake. Sin embargo había una banda mas dentro de las principales del festival: los canadienses de Anvil, quienes disfrutaban en ese entonces del suceso de su segundo disco Metal on metal.
¿Qué fue de la vida de la banda que parecía llevarse el mundo del metal por delante hace 25 años?
Mientras figuras importantes del rock pesado como Lars Ulrich de Metallica, Lemmy de Motorhead o Slash destacan la influencia y la importancia de Anvil en el desarrollo del género a principios de la década del 80, el cantante y guitarrista Lips maneja una camioneta de reparto y el baterista Robb Reiner (ambos fundadores del grupo rondando el medio siglo de vida) trabaja en el gremio de la construcción para sobrevivir, mientras en sus ratos libres continúan luchando por el metal tocando en pequeños bares ante un puñado de leales fanáticos
Este rockumental, (debut como director del guionista Sacha Gervasi) busca mostrar el ocaso de una banda veterana de heavy metal que supo tener sus quince minutos de fama 25 años atrás y sus tragicómicas experiencias en la búsqueda de la prácticamente imposible vuelta al estrellato. Desde agarrar del cuello al dueño de un bar por no querer pagarles un show, a quedar varados en una estación de tren en una fallida gira por Europa del Este, o tocar en un sótano para 10 borrachines, hasta intentar contactar al reconocido productor Chris Tsangarides para que vuelva a trabajar con ellos, situación que obliga al cantante a ingresar como telemarketer en un call center para poder afrontar los gastos
Anvil: The story of Anvil afortunadamente no es solamente un documental sobre una banda heavy casi olvidada; es una película sobre las vicisitudes de la industria musical, las idas y vueltas de la fama, y sobre todo la inmadurez, el rock en la edad adulta y la amistad (es emocionante ver como Robb y Lips, quienes hicieron un pacto de seguir unidos en la música pase lo que pase a los 14 años, se abrazan diciéndose “Te amo” luego de una de sus tantas peleas)
La lucha de Robb y Lips (ambos con familia, hijos y la presión diaria de llevar “una vida normal”) es perseverante hasta el borde de lo racional, con carcajadas y lágrimas incluidas, levantando orgullosamente la bandera de los perdedores.
Mientras figuras importantes del rock pesado como Lars Ulrich de Metallica, Lemmy de Motorhead o Slash destacan la influencia y la importancia de Anvil en el desarrollo del género a principios de la década del 80, el cantante y guitarrista Lips maneja una camioneta de reparto y el baterista Robb Reiner (ambos fundadores del grupo rondando el medio siglo de vida) trabaja en el gremio de la construcción para sobrevivir, mientras en sus ratos libres continúan luchando por el metal tocando en pequeños bares ante un puñado de leales fanáticos
Este rockumental, (debut como director del guionista Sacha Gervasi) busca mostrar el ocaso de una banda veterana de heavy metal que supo tener sus quince minutos de fama 25 años atrás y sus tragicómicas experiencias en la búsqueda de la prácticamente imposible vuelta al estrellato. Desde agarrar del cuello al dueño de un bar por no querer pagarles un show, a quedar varados en una estación de tren en una fallida gira por Europa del Este, o tocar en un sótano para 10 borrachines, hasta intentar contactar al reconocido productor Chris Tsangarides para que vuelva a trabajar con ellos, situación que obliga al cantante a ingresar como telemarketer en un call center para poder afrontar los gastos
Anvil: The story of Anvil afortunadamente no es solamente un documental sobre una banda heavy casi olvidada; es una película sobre las vicisitudes de la industria musical, las idas y vueltas de la fama, y sobre todo la inmadurez, el rock en la edad adulta y la amistad (es emocionante ver como Robb y Lips, quienes hicieron un pacto de seguir unidos en la música pase lo que pase a los 14 años, se abrazan diciéndose “Te amo” luego de una de sus tantas peleas)
La lucha de Robb y Lips (ambos con familia, hijos y la presión diaria de llevar “una vida normal”) es perseverante hasta el borde de lo racional, con carcajadas y lágrimas incluidas, levantando orgullosamente la bandera de los perdedores.
Ale "The Critic" Do Carmo
Comentarios
fantástica historia.