THE CULT - Hidden City (Cooking Vinyl 2016) *** 1/2
Born Into This (2007), el disco que trajo de vuelta a la dupla de Billy Duffy y Ian Astbury luego de seis años, logró ser un regreso convincente, tomando algunos elementos del pasado glorioso de la banda al nuevo milenio
Asimismo, Choice of Weapon, su demorado sucesor de 2012, no resultó tan certero a nivel compositivo, por lo que la banda intenta ahora dejar el mal trago atrás con el lanzamiento de Hidden City, el décimo disco de estudio del cuarteto.
Con un nombre inspirado por la Ciudad Oculta que homenajeaba Carlos Tevez en una remera, Hidden City marca el retorno del legendario Bob Rock a la consola de producción de manera full time (ya había cumplido esa tarea de forma parcial en el disco anterior); quien intenta retrotraer el sonido de The Cult a las míticas épocas de Electric (1987) y Sonic Temple (1989). Y a juzgar por la apertura de Dark Energy y la guitarrera GOAT por momentos parece lograrlo
De todos modos, tracks como Hinterland y Deeply Order Chaos marcan en Hidden City una referencia sonora más cercana a su corrosivo disco autotitulado de 1994, en donde Astbury y Duffy enfrentaban con dignidad el advenimiento del grunge y la Nación Alternativa.
Asimismo, Choice of Weapon, su demorado sucesor de 2012, no resultó tan certero a nivel compositivo, por lo que la banda intenta ahora dejar el mal trago atrás con el lanzamiento de Hidden City, el décimo disco de estudio del cuarteto.
Con un nombre inspirado por la Ciudad Oculta que homenajeaba Carlos Tevez en una remera, Hidden City marca el retorno del legendario Bob Rock a la consola de producción de manera full time (ya había cumplido esa tarea de forma parcial en el disco anterior); quien intenta retrotraer el sonido de The Cult a las míticas épocas de Electric (1987) y Sonic Temple (1989). Y a juzgar por la apertura de Dark Energy y la guitarrera GOAT por momentos parece lograrlo
De todos modos, tracks como Hinterland y Deeply Order Chaos marcan en Hidden City una referencia sonora más cercana a su corrosivo disco autotitulado de 1994, en donde Astbury y Duffy enfrentaban con dignidad el advenimiento del grunge y la Nación Alternativa.
A mitad de camino entre el guiño al glorioso pasado y el escape al estancamiento, The Cult suma un puñado de buenas canciones a su ya extensa lista
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