GLENN HUGHES – Resonate (Frontiers 2016) ****1/2
Luego del sabor amargo que dejó la repentina despedida de California Breed (su interesante proyecto junto al baterista Jason Bonham y al joven guitarrista Andrew White), Glenn
Hughes no se quedó de brazos cruzados y, paralelamente al anuncio del regreso
del supergrupo Black Country Communion
para 2017, se hace tiempo para lanzar su nuevo disco como solista tras ocho
años de silencio en el estudio
Poco tiempo antes de su salida, Hughes definió a Resonate como “probablemente
el material más pesado que haya hecho“ y
el comienzo con “Heavy” precisamente le da la razón a la Voz del Rock: un riff
gordo, una base hiper potente y un estribillo simple en donde el ex Deep Purple
se despacha a gusto con el virtuosismo de sus cuerdas vocales.
A diferencia de sus discos anteriores, que pecaban de dispares, en este nuevo trabajo Hughes sube la vara a nivel compositivo,
combinando lo mejor del hard rock de aires setentosos con su ya clásica
influencia de soul y funk que continúa presente pero en dosis más dispersas.
Con el versátil guitarrista y productor Søren Andersen como
coequiper, el bajista y cantante desgrana once tracks que lo remontan a sus épocas de profundidad púrpura, sobre todo con la decisiva inclusión del tecladista Lachy Doley que con
su uso del órgano Hammond marca el elemento clave del sonido de la placa, revistiendo temas
como "Let it shine", "God of Money" y la 100% purpleana "Steady", además de otorgarle
aire fresco a la rockera "My Town", la soulera "When I Fall", la funky "Landmines" y
el zeppeliniano cierre con la brillante "Long Time Gone"
Con la oportuna inclusión de Chad Smith de Red Hot Chili Peppers como
baterista invitado (complementando el trabajo del sueco Pontus Engborg) Resonate se postula como uno de los discos del año y probablemente el mejor trabajo en la carrera del bajista
quien, a los 65 años, se encuentra en un momento brillante.
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