ARCTIC MONKEYS – Humbug (Warner 2009) *** ½
El tercer disco es fundamental en la carrera de una banda, sobre todo si la misma tuvo un debut exitoso y un segundo álbum que continuó en la misma senda estilística. En este caso, el tercer disco de Arctic Monkeys marca la llegada de la madurez para la banda del guitarrista y cantanteAlex Turner y, sobre todo, un cambio estilístico, ya que dejan un poco de lado los arrebatos intempestivos de sus álbumes anteriores.
Sin llegar a sonar tan stoners como su look Black Sabbath y la producción de Josh Homme (de Queens of the Stone Age) demostrarían, se dan el lujo de sonar mas oscuros en algunos temas (como en My propeller que abre el disco) y con algunos tintes psicodélicos en otros (como en Dance little liar) pero dejando entrever una latente influencia de The Smiths, no solo por la entonación de Turner (con ínfulas de Morrisey) sino por temas como la lograda Cornerstone de pura cepa británica.
Sin pegar un giro de 180 grados, ni tampoco aferrándose a su pasado, Humbug marca un paso adelante en el desarrollo de una banda que aun tiene mucho para ofrecer.
MUSE – The resistance (Warner 2009) *** 1/2
En su quinto disco, la banda de Mathew Bellamy
se vuelve más ambiciosa que nunca, incluyendo pianos, orquestaciones, temas sobrecargados e hiperproducidos con oberturas y codas. Si bien el sonido clásico de la banda (con Radiohead como influencia principal) permanece en temas como Resistance o Undisclosed desires, The resistance también abarca la épica de Queen (United status of Eurasia suena tan parecido a La Reina que cosechó elogios hasta del mismísimo Brian May), la alternatividad a la Smashing Pumpkins en I belong to you y la épica sinfónica de Exogenesis, dividida en tres partes a la vieja usanza del rock progresivo de los ‘70s.
Quizás no sería tan extraño pensar que después de tanto barroquismo, el próximo disco de Muse sea un homenaje a The Ramones
LIVING COLOUR – The chair in the doorway (Megaforce 2009) ****
En su quinto disco (y el segundo después de su reunión en 2002) el cuarteto negro norteamericano que sentó las bases del funk metal a fines de los ’90, vuelve al nivel de lo mejor de su discografía, con un trabajo que se pasea sin problemas por diversos estilos que abarcan el metal (Decadence), el funk (Young man), la música industrial (Method) y el hard blues (Bless those).
Sonando hiper ajustados y demostrando toneladas de virtuosismo (presten atención a los solos del guitarrista Vernon Reid y a los arreglos de bajo de Dough Wimbish), The chair in the doorway resulta la puerta de entrada (sin ninguna silla en el medio) para una nueva generación de fanáticos
Mirá el video de Behind the sun en vivo en La Trastienda el 13/11/2009
Ale "The Critic" Do Carmo
Comentarios