IAN ANDERSON - Homo erraticus (Callandria/Icarus 2014) *** 1/2
Y la flauta sigue sonando
Luego de decretar el fin de su relación artística con su socio musical Martin Barre, Ian Anderson decidió poner indefinidamente a resguardo el nombre Jethro Tull y seguir adelante como solista lanzando la segunda parte del clásico Thick as a brick en 2012 con una buena repercusión
Homo erraticus (sexta entrega como solista de Anderson) viene a completar la historia, retomando en tres partes (Crónicas, Revelaciones y Profecías) la senda de Gerald Bostoc, el personaje que inspirara la saga en 1972.
En esta ocasión el niño prodigio, ya convertido en adulto, habiendo desempeñado el rol de tour manager del propio Anderson decide retomar su carrera literaria a traves del descubrimiento de unos manuscritos que le permiten recorrer los eventos más importantes de la historia británica
Si bien el comienzo con Doggerland tiene la marca de Anderson: influencias celtas, rock progresivo y la infaltable flauta traversa acompañando la melodía, tal cual los mejores momentos de Jethro Tull; con el correr de los temas el entusiasmo se va perdiendo debido a la voz un tanto apagada de Ian, sobre todo en los tramos más calmos como Heavy Metals y Meliora Sequamur
De todos modos, Homo Erraticus logra cumplir con su objetivo en algunos momentos, como en la épica The Turnpike Inn, la medieval The Engineer y el cierre con Cold Dead Reckoning
@aledocarmo
Agradecemos a Marcela Scorca de Icarus Music el material para su comentario
Luego de decretar el fin de su relación artística con su socio musical Martin Barre, Ian Anderson decidió poner indefinidamente a resguardo el nombre Jethro Tull y seguir adelante como solista lanzando la segunda parte del clásico Thick as a brick en 2012 con una buena repercusión
Homo erraticus (sexta entrega como solista de Anderson) viene a completar la historia, retomando en tres partes (Crónicas, Revelaciones y Profecías) la senda de Gerald Bostoc, el personaje que inspirara la saga en 1972.
En esta ocasión el niño prodigio, ya convertido en adulto, habiendo desempeñado el rol de tour manager del propio Anderson decide retomar su carrera literaria a traves del descubrimiento de unos manuscritos que le permiten recorrer los eventos más importantes de la historia británica
Si bien el comienzo con Doggerland tiene la marca de Anderson: influencias celtas, rock progresivo y la infaltable flauta traversa acompañando la melodía, tal cual los mejores momentos de Jethro Tull; con el correr de los temas el entusiasmo se va perdiendo debido a la voz un tanto apagada de Ian, sobre todo en los tramos más calmos como Heavy Metals y Meliora Sequamur
De todos modos, Homo Erraticus logra cumplir con su objetivo en algunos momentos, como en la épica The Turnpike Inn, la medieval The Engineer y el cierre con Cold Dead Reckoning
@aledocarmo
Agradecemos a Marcela Scorca de Icarus Music el material para su comentario
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