RADIOHEAD - Club Ciudad 24/03/09 ****
Mirá No surprises en vivo
Ranking de remeras
1 – Pink Floyd
2 – Pearl Jam
3 – The Beatles
4 – Nirvana
5 – Ramones
(Yo llevé una de Muse)
Luego de una ardua búsqueda no encontramos ninguna remera de La 25
TOP 3: las cosas que me molestan de un recital (o como me estoy volviendo mas viejo e intolerante)
- El uso de celulares – OK, entiendo que en tiempos de avances tecnológicos haya gente que quiera pasarse el 90% del recital tratando de sacar una foto de la banda con calidad de 1 megapixel, pero de ahí que te pongas a pasar las fotos a tu amigo por bluetooth en el medio del show hay un largo trecho!”
- El pogo – Comprendo que ir a ver a La Renga en Huracán o a Almafuerte en la cancha de Argentinos Juniors implique llevarte a casa litros de sudor ajeno en la remera, muchos magullones y algún que otro diente roto; pero de ahí a saltar como un desaforado empujando a los demás mientras suena No surprises hay una diferencia importante. ¡Digámosle NO al pogo indiscriminado en recitales caretas!
- Los cantantes frustrados – Una cosa es que le hagas el aguante al Pelado Cordera cuando se queda sin voz o que corees el estribillo de “Me mata” junto al Mono de Kapanga, pero de ahí a cantar como un desaforado TODOS y cada uno de los temas demostrando que tus años en la Cultural Inglesa de Adrogué no fueron en vano, es demasiado!
Todo en el lugar correcto
Ante un Club Ciudad con mas de 35 000 espectadores el quinteto británico cumplió el sueño de sus fans argentinos con un show a la altura de su prestigio
Los robots
Luego de la apertura oficial del festival con La Portuaria, por tercera vez en nuestro país, se presento una de las bandas que más influencia tuvo en el panorama del pop internacional en las últimas tres décadas: Kraftwerk. Si bien el marco de un estadio no es el adecuado para un grupo de esas características, el cuarteto alemán dio un show muy interesante que entusiasmó a los pocos fanáticos que los vieron y entretuvo a la gran mayoría que nunca los había escuchado. Con una excelente puesta visual, el cuarteto alemán entregó hits como Trans-Europe express, Tour de France 03, Autobahn, y el hilarante The robots, donde sus cuatro figuras son reemplazadas por 4 robots que ejecutan el tema (muchos de los presentes ni siquiera se dieron cuenta del truco, lo que habla de la poca humanidad de los integrantes originales). Un aperitivo muy interesante antes del suculento plato principal
Ahí, ahí
“Flaco, ¿vas a ver a Radiohead? ¡Yo también! Todavía no lo puedo creer. Todavía no caigo que van a tocar acá” me monologaba un fanático ansioso y muy sociable en el colectivo de ida al show, y me hizo caer en las expectativas creadas por esta visita: ¿cuantas veces tuvimos la oportunidad de ver una de las bandas más importantes a nivel mundial en uno de sus mejores momentos? ¿Cuantas veces más la tendremos?
Minutos después de las 21:30 se acabó la expectativa: se apagaron las luces y la banda entró como si fuera el living de su casa para arrancar con 15 step, tema que abre In rainbows, su ultimo disco. Seguramente no era el mejor tema para arrancar (Just o Planet telex hubieran sido mucho más eficaces), pero dejaba a las claras que aunque fuera la primera visita al país, la banda no iba a modificar sustancialmente su lista de temas de la gira y se enfocaría principalmente en las canciones de su ultima placa. Con Airbag, (tema de apertura de OK computer, su obra máxima), en segundo lugar, el show comenzó a tomar forma y ganar en calor. El público (a veces exageradamente) cantaba y bailaba absolutamente todos los temas. Con respecto al repertorio, la banda intentó balancearlo de modo tal que conformara a todos, algo bastante difícil por cierto. Hubo lugar para aquellos hits que no podían faltar como Karma Police y la hermosa No surprises; para los temas mas rockeros ideales para tocar en vivo como Paranoid android, Planet telex o Bodysnatchers (las tres en versiones incendiarias), y también hubo espacio (quizás demasiado) para los temas más experimentales, con influencias que van desde la electrónica hasta el Kraut rock y el acid jazz como There, there, Pyramid song, Idioteque o 2+2=5.
¿Sin sorpresas?
Precisamente en el repertorio esta una de las claves para entender el concierto y a la banda en si. Cuando luego de su consagración en 1997 con OK computer decidieron lanzar el anticomercial Kid A, la banda marco una posición muy clara con respecto a la fama cuyo límite es la autolimitacion. Lo mismo paso en el Club Ciudad: si en vez de 10 temas de In rainbows solo hubieran tocado la mitad y hubiesen agregado en la lista de temas High and dry, Fake plastic trees, Just o My iron lung seguramente todavía estaría aplaudiendo en el estadio esperando por otro bis. De ahí la sensación ambivalente de valorar lo que la banda quiere pero no dejar de reclamar lo que uno quiere
Androides paranoicos
Es difícil que no sobresalga la actuación de Thom Yorke, impecable a nivel vocal, destacable a nivel musical (guitarra, piano y percusión), parco a nivel comunicación (un “gracias” aislado después de algunos temas) y disléxico a nivel frontman, con un extraño baile en los momentos instrumentales que lo hacia parecer a un nerd desgarbado y epiléptico. Pero el resto de la banda no son meros acompañantes: el bajista Colin Greenwood es el verdadero motor de la banda, muchas veces escondido en el fondo pero apuntalando todo con un sonido gordo y enérgico, acompañamiento ideal en la base para el batero Phil Selway que se maneja con comodidad tanto en los polirrítmicos pasajes instrumentales como con la interacción de los elementos electrónicos.
Los robots
Luego de la apertura oficial del festival con La Portuaria, por tercera vez en nuestro país, se presento una de las bandas que más influencia tuvo en el panorama del pop internacional en las últimas tres décadas: Kraftwerk. Si bien el marco de un estadio no es el adecuado para un grupo de esas características, el cuarteto alemán dio un show muy interesante que entusiasmó a los pocos fanáticos que los vieron y entretuvo a la gran mayoría que nunca los había escuchado. Con una excelente puesta visual, el cuarteto alemán entregó hits como Trans-Europe express, Tour de France 03, Autobahn, y el hilarante The robots, donde sus cuatro figuras son reemplazadas por 4 robots que ejecutan el tema (muchos de los presentes ni siquiera se dieron cuenta del truco, lo que habla de la poca humanidad de los integrantes originales). Un aperitivo muy interesante antes del suculento plato principal
Ahí, ahí
“Flaco, ¿vas a ver a Radiohead? ¡Yo también! Todavía no lo puedo creer. Todavía no caigo que van a tocar acá” me monologaba un fanático ansioso y muy sociable en el colectivo de ida al show, y me hizo caer en las expectativas creadas por esta visita: ¿cuantas veces tuvimos la oportunidad de ver una de las bandas más importantes a nivel mundial en uno de sus mejores momentos? ¿Cuantas veces más la tendremos?
Minutos después de las 21:30 se acabó la expectativa: se apagaron las luces y la banda entró como si fuera el living de su casa para arrancar con 15 step, tema que abre In rainbows, su ultimo disco. Seguramente no era el mejor tema para arrancar (Just o Planet telex hubieran sido mucho más eficaces), pero dejaba a las claras que aunque fuera la primera visita al país, la banda no iba a modificar sustancialmente su lista de temas de la gira y se enfocaría principalmente en las canciones de su ultima placa. Con Airbag, (tema de apertura de OK computer, su obra máxima), en segundo lugar, el show comenzó a tomar forma y ganar en calor. El público (a veces exageradamente) cantaba y bailaba absolutamente todos los temas. Con respecto al repertorio, la banda intentó balancearlo de modo tal que conformara a todos, algo bastante difícil por cierto. Hubo lugar para aquellos hits que no podían faltar como Karma Police y la hermosa No surprises; para los temas mas rockeros ideales para tocar en vivo como Paranoid android, Planet telex o Bodysnatchers (las tres en versiones incendiarias), y también hubo espacio (quizás demasiado) para los temas más experimentales, con influencias que van desde la electrónica hasta el Kraut rock y el acid jazz como There, there, Pyramid song, Idioteque o 2+2=5.
¿Sin sorpresas?
Precisamente en el repertorio esta una de las claves para entender el concierto y a la banda en si. Cuando luego de su consagración en 1997 con OK computer decidieron lanzar el anticomercial Kid A, la banda marco una posición muy clara con respecto a la fama cuyo límite es la autolimitacion. Lo mismo paso en el Club Ciudad: si en vez de 10 temas de In rainbows solo hubieran tocado la mitad y hubiesen agregado en la lista de temas High and dry, Fake plastic trees, Just o My iron lung seguramente todavía estaría aplaudiendo en el estadio esperando por otro bis. De ahí la sensación ambivalente de valorar lo que la banda quiere pero no dejar de reclamar lo que uno quiere
Androides paranoicos
Es difícil que no sobresalga la actuación de Thom Yorke, impecable a nivel vocal, destacable a nivel musical (guitarra, piano y percusión), parco a nivel comunicación (un “gracias” aislado después de algunos temas) y disléxico a nivel frontman, con un extraño baile en los momentos instrumentales que lo hacia parecer a un nerd desgarbado y epiléptico. Pero el resto de la banda no son meros acompañantes: el bajista Colin Greenwood es el verdadero motor de la banda, muchas veces escondido en el fondo pero apuntalando todo con un sonido gordo y enérgico, acompañamiento ideal en la base para el batero Phil Selway que se maneja con comodidad tanto en los polirrítmicos pasajes instrumentales como con la interacción de los elementos electrónicos.
Entre el trabajo de Jonny Greenwood y Ed O Brien se desarrolla el sonido de la banda. Principalmente guitarristas de diversa índole (Greenwood mas aliado de la distorsión, los efectos y los solos rabiosos, O’Brien mas complaciente con la melodía y las armonías), no dudan en intercambiar instrumentos (percusión, samplers, sintetizadores y efectos varios) y en ocupar alternativamente el lugar secundario
Como desaparecer completamente (para volver a aparecer en los bises)
Hubo tiempo para que a Yorke le acertaran con un proyectil (los reportes dicen que fue una ojota) demostrando que la estupidez también puede pagar 90 dólares para ver un show, para que O’Brien en un bastante claro español le dedicara una sentida versión de How to disappear completely a las victimas de la ultima dictadura militar, para que el estadio se convierta en una inmensa discoteca (con la impresionante escenografía e iluminación del escenario destacándose mas que nunca) con Idioteque y Everything In Its Right Place y la despedida casi definitiva, antes de una bastante fría versión de Creep como concesión al publico (¿habrá sido por eso el desgano?) sin la emoción de las versiones anteriores
Lista de temas
15 Step
Airbag
There There
All I Need
Kid A
Karma Police
Nude
Weird Fishes/Arpeggi
The National Anthem
The Gloaming
No Surprises
Pyramid Song
Street Spirit (Fade Out)
Jigsaw Falling Into Place
Idioteque
Bodysnatchers
How to Disappear Completely
Videotape
Paranoid Android
House Of Cards
Reckoner
Planet Telex
Go Slowly
2+2=5
Everything In Its Right Place
Creep
Como desaparecer completamente (para volver a aparecer en los bises)
Hubo tiempo para que a Yorke le acertaran con un proyectil (los reportes dicen que fue una ojota) demostrando que la estupidez también puede pagar 90 dólares para ver un show, para que O’Brien en un bastante claro español le dedicara una sentida versión de How to disappear completely a las victimas de la ultima dictadura militar, para que el estadio se convierta en una inmensa discoteca (con la impresionante escenografía e iluminación del escenario destacándose mas que nunca) con Idioteque y Everything In Its Right Place y la despedida casi definitiva, antes de una bastante fría versión de Creep como concesión al publico (¿habrá sido por eso el desgano?) sin la emoción de las versiones anteriores
Lista de temas
15 Step
Airbag
There There
All I Need
Kid A
Karma Police
Nude
Weird Fishes/Arpeggi
The National Anthem
The Gloaming
No Surprises
Pyramid Song
Street Spirit (Fade Out)
Jigsaw Falling Into Place
Idioteque
Bodysnatchers
How to Disappear Completely
Videotape
Paranoid Android
House Of Cards
Reckoner
Planet Telex
Go Slowly
2+2=5
Everything In Its Right Place
Creep
Mirá No surprises en vivo
Ranking de remeras
1 – Pink Floyd
2 – Pearl Jam
3 – The Beatles
4 – Nirvana
5 – Ramones
(Yo llevé una de Muse)
Luego de una ardua búsqueda no encontramos ninguna remera de La 25
TOP 3: las cosas que me molestan de un recital (o como me estoy volviendo mas viejo e intolerante)
- El uso de celulares – OK, entiendo que en tiempos de avances tecnológicos haya gente que quiera pasarse el 90% del recital tratando de sacar una foto de la banda con calidad de 1 megapixel, pero de ahí que te pongas a pasar las fotos a tu amigo por bluetooth en el medio del show hay un largo trecho!”
- El pogo – Comprendo que ir a ver a La Renga en Huracán o a Almafuerte en la cancha de Argentinos Juniors implique llevarte a casa litros de sudor ajeno en la remera, muchos magullones y algún que otro diente roto; pero de ahí a saltar como un desaforado empujando a los demás mientras suena No surprises hay una diferencia importante. ¡Digámosle NO al pogo indiscriminado en recitales caretas!
- Los cantantes frustrados – Una cosa es que le hagas el aguante al Pelado Cordera cuando se queda sin voz o que corees el estribillo de “Me mata” junto al Mono de Kapanga, pero de ahí a cantar como un desaforado TODOS y cada uno de los temas demostrando que tus años en la Cultural Inglesa de Adrogué no fueron en vano, es demasiado!
Ale "Weirdo" Do Carmo
Comentarios
Precisamente en el repertorio esta una de las claves para entender el concierto y a la banda en si. Cuando luego de su consagración en 1997 con OK computer decidieron lanzar el anticomercial Kid A, la banda marco una posición muy clara con respecto a la fama cuyo límite es la autolimitacion. Lo mismo paso en el Club Ciudad: si en vez de 10 temas de In rainbows solo hubieran tocado la mitad y hubiesen agregado en la lista de temas High and dry, Fake plastic trees, Just o My iron lung seguramente todavía estaría aplaudiendo en el estadio esperando por otro bis. De ahí la sensación ambivalente de valorar lo que la banda quiere pero no dejar de reclamar lo que uno quiere.
Creo que por esto no fui, era ´más que previsible que me iban a dejar con las ganas de más... Y coincidimos.
Tal cual lo que decís al final, no es de viejo. La gente es estúpida y en los recitales adopta costumbres que tienen más que ver con el "yo estuve ahí" que con el disfrute del momento como algo único. Detesto a esos especímenes que están con el cel, a los que agitan y saltan en momentos que no va, y en especial a los cantantes que te tapan al cantante que fuiste a oir. Me calenté, jeje.
me gusto eso de "... NO al pogo indiscriminado en recitales caretas! ...",
sobre todo lo de recital careta