ANDRES CALAMARO – On the rock (Warner Music Spain 2010) ** 1/2
La lengua popular significo para Andrés Calamaro (si bien con algunos altibajos a nivel composición), la vuelta a su sonido característico con influencias de Bob Dylan y Lou Reed mas la veta hispánica que lleva consigo desde la época de Los Rodriguez, luego de experimentar con el tango y el bolero. Lamentablemente en este nuevo On the rock, a pesar del titulo y la gráfica, el rock, si bien aparece tímidamente, queda diluido entre la infructuosa búsqueda de la canción perfecta
El comienzo de un disco, aun en la era del Ipod, tiene que marcar presencia y ser la carta fuerte de introducción al sonido del resto de la placa. Definitivamente el flamenco pop de El barco (con el cantaor Diego El Cigala de invitado) no cumple el objetivo y predispone de manera extraña el oído para el resto de los temas que incluyen coqueteos con el hip hop latino (Te extraño), la cumbia (Tres Marías con Vicentico de invitado), la rima fácil (arruinando un buen tema como Los Divinos) y la ranchera (la hiperversionada Te solté la rienda con un desaprovechado Enrique Bunbury)
Ni el tiro del final le sale Andrés con la definitiva versión del El Perro (aquel tema que fuera cortina del programa de Jorge Lanata a fines de los tumultuosos 90s) que con versos como "la coima en el senado no es pecado el pibe esta en cana por viajar colado” atrasa mas que Hora Clave
Lo más rescatable llega con las baladas que le quedan a Calamaro como anillo al dedo como Todos se van, los rockitos como Flor de samurai o Gomontonera y el jazzy Insoportablemente cruel (con Calle 13)
On the rock tiene poco gancho, no entretiene, los numerosos invitados no suman, y termina deambulando entre Sabina y Keith Richards, defraudando y no llegando a ningún lado.
Bastante poco para uno de los artistas más importantes de Latinoamérica
La lengua popular significo para Andrés Calamaro (si bien con algunos altibajos a nivel composición), la vuelta a su sonido característico con influencias de Bob Dylan y Lou Reed mas la veta hispánica que lleva consigo desde la época de Los Rodriguez, luego de experimentar con el tango y el bolero. Lamentablemente en este nuevo On the rock, a pesar del titulo y la gráfica, el rock, si bien aparece tímidamente, queda diluido entre la infructuosa búsqueda de la canción perfecta
El comienzo de un disco, aun en la era del Ipod, tiene que marcar presencia y ser la carta fuerte de introducción al sonido del resto de la placa. Definitivamente el flamenco pop de El barco (con el cantaor Diego El Cigala de invitado) no cumple el objetivo y predispone de manera extraña el oído para el resto de los temas que incluyen coqueteos con el hip hop latino (Te extraño), la cumbia (Tres Marías con Vicentico de invitado), la rima fácil (arruinando un buen tema como Los Divinos) y la ranchera (la hiperversionada Te solté la rienda con un desaprovechado Enrique Bunbury)
Ni el tiro del final le sale Andrés con la definitiva versión del El Perro (aquel tema que fuera cortina del programa de Jorge Lanata a fines de los tumultuosos 90s) que con versos como "la coima en el senado no es pecado el pibe esta en cana por viajar colado” atrasa mas que Hora Clave
Lo más rescatable llega con las baladas que le quedan a Calamaro como anillo al dedo como Todos se van, los rockitos como Flor de samurai o Gomontonera y el jazzy Insoportablemente cruel (con Calle 13)
On the rock tiene poco gancho, no entretiene, los numerosos invitados no suman, y termina deambulando entre Sabina y Keith Richards, defraudando y no llegando a ningún lado.
Bastante poco para uno de los artistas más importantes de Latinoamérica
Comentarios
hasta uno de tangos que daba vergüenza dijeron tuvo buenas criticas..
Saludos